Portada del libro Fernando Buesa, Una biografía política.Antonio Rivera y Eduardo Mateo. Editorial Catarata. Ramón Rubial Fundazioa.
10 de febrero de 2021. El título del libro que reseña David Mota Zurdo es ‘Fernando Buesa, una biografía política. No vale la pena matar ni morir’, escrito por Antonio Rivera y Eduardo Mateo. David Mota Zurdo, coordinador del Grado en Historia y Geografía de la Universidad Isabel I, ha seleccionado esta publicación para detallar en una reseña del número 53 de la revista Historia Actual Online, una publicación electrónica cuatrimestral y multilingüe, que fomenta el debate historiográfico de actualidad y difunde la investigación en todos los ámbitos de la historia actual. En cada número publican artículos, revisiones, entrevistas, debates historiográficos, reseñas de libros y comentarios de material audiovisual.
En el último número que acaba de ver la luz, David Mota Zurdo recuerda el asesinato de Fernando Buesa Blanco el 22 de febrero del año 2000 en el campus universitario de Vitoria, cuando el comando Ituren de ETA colocó más de 20 kilos de explosivos en una furgoneta y acabó con la vida tanto del portavoz del PSE en el Parlamento Vasco como de su escolta, el ertzaina Jorge Díez Elorza. Buesa, como ex vicepresidente del Gobierno autónomo fue uno de los políticos más críticos contra ETA y, por eso estuvo entre sus objetivos.
El atentado en el campus universitario se produjo apenas un mes después de que ETA asesinara al teniente coronel Pedro Antonio Blanco, con el que se rompió una tregua que la banda terrorista había iniciado en septiembre de 1998. La organización terrorista quiso iniciar así un proceso de diálogo y negociación con las fuerzas nacionalistas vascas para obtener la independencia del País Vasco. La reunión se celebró en la localidad navarra de Estella, donde se gestó el conocido como ‘Pacto de Lizarra’. Este acuerdo dejó fuera de la negociación a los dos partidos nacionales con representación en el Gobierno (PP) y la oposición (PSOE), ambos contrarios a ofrecer concesiones a la banda terrorista para obtener una salida política negociada.
La biografía política de Fernando Buesa
David Mota Zurdo explica en la reseña del libro de Antonio Rivera, catedrático de Historia Contemporánea de la UPV-EHU, y Eduardo Mateo, responsable de la gestión de proyectos y documentación de la Fundación Fernando Buesa, que se trata de una obra de gran interés sobre uno de los políticos vascos más destacados de nuestra historia reciente: Fernando Buesa. ‘Lo hacen con mucho tino, sin escamotear en detalles, independientemente de que estos sean negativos o positivos. De hecho, esta monografía palia un vacío historiográfico notable al analizar la trayectoria política de uno de los dirigentes vascos más destacable de las últimas décadas del siglo XX’, subraya el docente de la Universidad Isabel I.
Hasta la elaboración de esta biografía Fernando Buesa había sido considerado una víctima de ETA más, circunstancia que ‘eliminó su trayectoria anterior y se ciñó a los meses y años previos al atentado. En cierto modo, tal condición contribuyó a una suerte de damnatio memoriae de su labor política y social, aun cuando en los días y semanas posteriores a su muerte sus compañeros de partido y amigos, como Javier Rojo, y adversarios políticos, como el nacionalista vasco José Ángel Cuerda, lo pusieran en valor’, matiza David Mota Zurdo. Los autores del libro analizan cómo Buesa pasó de posicionamientos políticos democristianos durante la década de 1970 a formar parte del PSOE con una visión socialdemócrata. En su actividad como vice-lehendakari y Consejero de Educación, gestionó la conversión de las ikastolas en centros educativos públicos y se mostró inflexible ante el fin del terrorismo negociado políticamente. Y al frente de la Diputación de Álava, consiguió construir un nuevo estadio de baloncesto para el Baskonia (entonces Taugrés) en las afueras de Vitoria, pese a la negativa del alcalde de la ciudad. Hoy, a ese estadio, se le conoce como el ‘Buesa Arena’.
Los autores de esta bibliografía no omiten que la trayectoria de este político no se entiende sin su familia y amigos o su entorno, que se estudian de manera prolija en el libro. David Mota Zurdo destaca que su biografía ‘ha dejado una honda huella en la sociedad vasca, alavesa y vitoriana e incluso en la española. Y es que, hasta en los momentos más duros, cuando la amenaza contra su vida fue patente, el político vitoriano siguió apostando por las palabras, anteponiendo el diálogo a las pistolas’, concluye el autor de la reseña.