Prácticas de laboratorio en la Universidad Isabel I.
2 de marzo de 2022. “Gracias a las prácticas, cuando estudiamos para el examen, recordamos mejor todo lo aprendido”, explica María, alumna de primer curso del Grado en Nutrición Humana y Dietética de la Universidad Isabel I. A lo largo de tres jornadas, Carlos, José, María, Jorge, Soledad y Marina han podido poner en práctica sus conocimientos teóricos con los distintos ejercicios y pruebas propuestos por los docentes en las prácticas de laboratorio que se requieren en el primer curso de su titulación.
Los estudiantes han acudido a los laboratorios del edificio de I+D+i de la universidad para realizar las prácticas en las asignaturas de Anatomía, Fisiología e Iniciación al Trabajo de Laboratorio.
La coordinadora de las prácticas, Blanca Couce Sánchez, ha señalado que los alumnos han plasmado en el laboratorio su aprendizaje teórico. “Los alumnos de primero acuden en dos ocasiones a los laboratorios para realizar las prácticas. Cada trimestre tienen dos sesiones con los profesores de cada asignatura en la que se requiere acudir al laboratorio, según se planifica en el plan de estudios”, subraya la docente Selene Baos Muñiz. Así, durante el primer trimestre, en la asignatura de Anatomía, diseccionaron un corazón y en el segundo trimestre, la disección en el laboratorio ha sido de un riñón.
El profesor Luis Andrés Castillo López explicando la práctica.
El profesor Luis Andrés Castillo López, que imparte la asignatura de Anatomía, ayudó a los alumnos a poner en práctica el conocimiento de los diferentes sistemas corporales: el musculoesquelético, el cardiovascular, el digestivo o el renal. “Lo que más me ha gustado ha sido la disección del corazón y del riñón, porque se ven perfectamente todas las partes que se aprenden antes en la teoría”, explica José, uno de los alumnos del curso.
Los alumnos Carlos y José realizando la disección de un riñón.
En la asignatura de Fisiología, las prácticas se han centrado en: mediciones de glucemia tras la ingesta de alimentos ricos en hidratos de carbono; una espirometría, que mide distintos volúmenes de aire con el fin describir la función respiratoria; o un electrocardiograma, que registra la actividad eléctrica del corazón.
Medición de la concentración de glucosa en sangre.
Otra de las pruebas realizadas por los alumnos se ha orientado a conocer la actividad enzimática. Esta actividad se mide de forma indirecta con el espectrofotómetro, un equipo que hace pasar una radiación electromagnética a través de una solución para medir la absorbancia.
Otra prueba de laboratorio.
“A mí me ha gustado la práctica de laboratorio de cromatografía”, concretó Carlos, un método cualitativo que consiste en separar los componentes de una mezcla para poder identificarlos. “En esta práctica, al ser de nutrición, realizamos dos pruebas, una de lípidos (comparando un huevo de codorniz con uno de gallina) y otra de pigmentos vegetales (con espinacas)”, concretó Selene Baos Muñiz, profesora de la asignatura de Iniciación al Trabajo de Laboratorio. En esta asignatura se han orientado las prácticas hacia la genética, con varios experimentos prácticos en el laboratorio de la universidad.
Han observado un cariotipo, una imagen que representa el conjunto de los cromosomas de una especie. A partir del cariotipo han podido representar un idiograma, que corresponde a la imagen ordenada de los cromosomas en función de su tamaño, forma y patrón de tinción. con este estudio han podido determinar aneuploidías (pérdida o ganancia de cromosomas respecto a la dotación normal).
Todos los alumnos pudieron realizar una puesta en común de algunos rasgos hereditarios gracias al estudio de genética heredable que también realizaron como práctica en estas jornadas. Y siguiendo con la materia, pudieron extraer el ADN de un plátano con distintos tratamientos en el que conocieron la estructura fibrilar de esta molécula.
Los alumnos realizando la prueba de ADN del plátano.
María, como alumna, comenta que una de las prácticas que más le han gustado es el análisis de los cortes histológicos con el microscopio. “Hemos podido aprender cómo se pueden distinguir diversos tejidos biológicos cuando se someten al microscopio electrónico. Creo que ha sido la prueba más difícil, pero también muy interesante. En las demás pruebas de laboratorio, hay que seguir unas pautas para que el experimento pueda realizarse. En el caso del análisis del microscopio, es más la intuición y el conocimiento lo que se utiliza”, concreta.
Los alumnos de prácticas comenzaron su formación el pasado mes de octubre. Aunque alguno de ellos ha realizado previamente otro grado universitario como Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, Farmacia o otros provienen del Técnico superior en Dietética.
Vídeo de las prácticas.