El profesor Francesc Gascó en la Fundación Palarq.
26 de febrero de 2024. El paleontólogo Francesc Gascó, profesor del Máster en Divulgación Científica de la Universidad Isabel I, explica en un nuevo vídeo de la Fundación Palarq, el control del fuego en la Prehistoria. El divulgador científico hace referencia a los importantes hallazgos arqueológicos en lugares como la cuenca del río Jordán, en Israel; el yacimiento de Koobi Fora en Kenia o Wonderwerk Cave, en Sudáfrica, donde se han encontrado evidencias del uso temprano del fuego por parte del descubrimiento del homo erectus. “Una de las características que se le atribuyó a esta especiel, el homo erectus, es que tuvo un control o uso del fuego”, detalla en el vídeo.
Las investigaciones arqueológicas realizadas hasta el momento demuestran, por ejemplo, que en la cuenca del río Jordán, hace ya 1.5 millones de años, se utilizaba el fuego por el homo erectus, aunque todavía no habían aprendido a generarlo. Se estima que la generación de fuego por parte de los humanos es una habilidad que se consolidó hace 790.000 años.
Un equipo de la Universidad George Washington liderado por la arqueóloga Sara Hlubik ha encontrado en el yacimiento Koobi Fora de Kenia la evidencia de huesos calcinados, que podrían tener una antigüedad entre 1.6 y 1.4 millones de años. “Esta evidencia puede llevar a pensar un uso del fuego bastante anterior a lo que se creía hasta ahora”, explica el profesor Gascó.
Otro ejemplo se encuentra en la cueva Wonderwerk de Sudáfrica, en el que un equipo multidisciplinar liderado por la Universidad de Toronto ha identificado posibles evidencias de hogueras con una antigüedad de 1.5 millones de años.
Árbol ardiendo por la acción de un rayo.
El profesor Gascó recordó que las primeras poblaciones de humanos experimentaron el fuego en plena naturaleza producido por fenómenos naturales como la caída de un rayo sobre un árbol, generando luz y calor. Esos primeros humanos trataron de descubrir el control del fuego, en un principio, por mera curiosidad, aunque posteriormente, para utilizar en un sinfín de actividades diarias.
Francesc Gascó recuerda la revolución que generó el fuego al utilizarlo para cocinar los alimentos, lo que facilitó no solo su consumo y mejoró la absorción de nutrientes sino que redujo los riesgos de enfermedades generadas por alimentos crudos o en mal estado. Otra de las ventajas del fuego es la protección contra depredadores, además de ofrecer calor y luz, especialmente, en invierno.