David Freire, teletrabajando

El egresado de la Universidad Isabel I, David Freire Ledo, teletrabajando.

10 de septiembre de 2024. La investigación de David Freire Ledo, egresado del Grado en Derecho y el Máster en Prevención de Riesgos Laborales en la Universidad Isabel I, se centra en las nuevas tendencias del teletrabajo, un fenómeno que llevó a la adaptación masiva al trabajo desde el domicilio tras la pandemia del COVID-19. La urgencia de regular esta modalidad fue abordada en España primero con el Real Decreto-Ley 28/2020 y posteriormente con la Ley de trabajo a distancia 10/2021. Este artículo, publicado en el último número de la Revista Jurídica Valenciana, analiza tres aspectos fundamentales: la necesidad de equipos y herramientas para el teletrabajo, las incidencias técnicas que puedan surgir durante la jornada laboral y los riesgos de accidentes laborales en el domicilio del trabajador. Estos temas son esenciales para comprender y mejorar el marco normativo que rige el teletrabajo en España.

El confinamiento concluyó en junio de 2020, pero muchos trabajadores continuaron teletrabajando, lo que subrayó la necesidad de una regulación más robusta. En este contexto, surgen nuevas tendencias en teletrabajo que requieren un análisis detallado, “especialmente en cuanto a los gastos de equipos y herramientas, las incidencias durante la jornada laboral y los accidentes que puedan ocurrir en el domicilio del trabajador”, señala David Freire.

En el trabajo de investigación se busca comprender cómo estos factores afectan tanto a trabajadores como a empresarios y de qué manera la legislación actual puede adaptarse a estas nuevas realidades. Para ello, Freire identifica las tendencias emergentes en el teletrabajo, evalúa la importancia de los conflictos y necesidades que surgen al trabajar desde el domicilio. En su investigación también examina los gastos en equipos y herramientas necesarios para el teletrabajo, estudia los problemas relacionados con las desconexiones o incidencias técnicas, además de evaluar los accidentes laborales en el contexto del teletrabajo.

Nuevas tendencias en materia de teletrabajo

El teletrabajo que inicialmente fue una respuesta temporal a la crisis sanitaria se ha consolidado como una opción preferida por muchos trabajadores, debido a beneficios como la conciliación familiar y la reducción de gastos.

Entre las demandas más destacadas se encuentra la necesidad de que los empleadores cubran los gastos asociados a equipos y herramientas para poder desarrollar su actividad profesional con el teletrabajo. También es fundamental abordar las incidencias técnicas durante la jornada laboral (como fallos de conexión o problemas con los dispositivos), que pueden impedir el correcto desempeño de las funciones laborales. Además, los accidentes laborales en el domicilio, ya sea en la zona destinada al trabajo o en otras partes de la vivienda, requieren un análisis jurídico riguroso.

Jornada de trabajo

La Ley de Trabajo a Distancia garantiza que el teletrabajo no debe suponer una vulneración de los derechos de los empleados. Un ejemplo ilustrativo es la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de febrero de 2022, donde se reconoció el derecho de una trabajadora a teletrabajar por razones de conciliación familiar. “Este y otros casos subrayan la importancia de mantener la equidad entre trabajadores presenciales y teletrabajadores”, matiza David Freire.

Durante la jornada laboral en teletrabajo, pueden surgir situaciones comparables a las del trabajo presencial, como caídas o problemas informáticos. Sin embargo, el teletrabajo elimina ciertos riesgos, como los accidentes "in itinere", pero introduce otros, como las desconexiones técnicas, que pueden ser más difíciles de gestionar en el domicilio del trabajador.

Las incidencias técnicas durante la jornada laboral son un aspecto crítico del teletrabajo. La jurisprudencia reciente, como la sentencia de la Audiencia Nacional de mayo de 2021, establece que las desconexiones no imputables al trabajador deben considerarse tiempo de trabajo efectivo. Esto refuerza la necesidad de que los empleadores proporcionen los medios técnicos adecuados para evitar que los trabajadores sufran perjuicios debido a fallos que no están bajo su control.

Por otra parte, Freire indica que los accidentes laborales durante el teletrabajo deben ser considerados como tales si ocurren en el lugar y tiempo de trabajo. La jurisprudencia ha abordado casos en los que las lesiones sufridas en el domicilio del trabajador han sido reconocidas como accidentes laborales, siempre que se pueda demostrar una conexión directa con el desempeño de las funciones laborales.

Conclusiones

El teletrabajo ha llegado para quedarse, pero su consolidación depende de una legislación robusta y adaptada a las realidades actuales. Es fundamental seguir analizando las situaciones que surgen con el tiempo, especialmente en cuanto a tecnología, condiciones laborales, y conciliación familiar. Esto permitirá una adaptación óptima a esta modalidad de trabajo, garantizando que tanto trabajadores como empleadores puedan beneficiarse de sus ventajas sin sufrir perjuicios. El estudio detallado de los gastos, incidencias y riesgos asociados al teletrabajo es fundamental para asegurar un marco normativo que proteja adecuadamente los derechos de los trabajadores y fomente la eficiencia y equidad en el entorno laboral.