6 de junio de 2017. Marcos Terradillos Bernal, profesor de la Universidad Isabel I, ha formado parte del equipo encargado de una investigación que revela que los neandertales apenas fabricaron microlitos (instrumentos de pequeñas dimensiones), dada la estructura y dimensiones de sus manos; y no por deficiencias cognitivas o simbólicas como se pensaba hasta ahora.
Los resultados de este trabajo dirigido por Francia Patiño y Manuel Martín-Loeches del grupo de investigación del Centro Mixto de la Universidad Complutense de Madrid y el Instituto de Salud Carlos III, y con la participación de Paleorama, se han publicado en la prestigiosa revista internacional Journal of Anthropolological Sciences (tercera en el ranking internacional de revistas sobre Antropología), y revelan que de las ocho posiciones manuales necesarias para la fabricación de este tipo de industria, seis suponían un tremendo estrés mecánico para la mano del Neandertal.
La fabricación de los microlitos, una herramienta de piedra de entre uno y tres centímetros, requiere de una gran habilidad en ambas manos, así como de movimientos muy definidos y precisos. Estos movimientos serían complejos para las manos de los Neandertales al disponer de unas falanges más cortas.
La investigación ha analizado biomecánicamente los movimientos de unos expertos talladores para determinar cuáles eran los movimientos fundamentales de cara a la obtención de microlitos. Y ha revelado que la estructura de las manos de los Neandertales hacía mucho más compleja la fabricación de estas herramientas.