Necrópolis de Lucena en Córdoba.
2 de agosto de 2022. Ricardo Ortega-Ruiz, profesor de Antropología Forense del Grado en Criminología de la Universidad Isabel I y director del laboratorio de Arqueología y Antropología Forense del Instituto de Formación Profesional en Ciencias Forenses, ha dirigido la formación práctica de un proyecto internacional de formación en coordinación con la Sanisera Archaeology Institute for International Field Schools.
Desde el 14 al 29 de julio ha coordinado el trabajo de prácticas de un grupo de estudiantes de Estados Unidos y Canadá en las dependencias del Museo Arqueológico de Lucena (Córdoba), para aprender y poner en práctica los protocolos internacionales de identificación humana dentro del ámbito de la antropología física y forense.
Estudio forense de los restos óseos.
En el trabajo de cooperación internacional se han analizado los restos óseos procedentes de la campaña de excavación arqueológica llevada a cabo por Patrimonio Histórico de la ciudad de Lucena en el yacimiento de Cortijo Coracho, datado entre los S. III y VII d.C. Este cortijo fue ocupando en el periodo histórico que abarca desde el final del Imperio Romano de Occidente y la colonización de esta zona del continente por los pueblos germanos. Además de la necrópolis, el yacimiento presenta una basílica asociada a la zona de inhumación. Presenta tres periodos históricos en base a su morfología y desarrollo: prerromana, visigoda y bizantina, aportando cada cultura sus influencias arquitectónicas en el edificio religioso para adaptarse al ritual funerario de cada creencia.
La necrópolis presenta 297 inhumaciones de las que se han recuperado hasta la fecha 424 individuos, presentando cambios en los ritos funerarios respecto al periodo imperial romano: la distribución de las inhumaciones se presenta de un modo más irregular, han perdido la complejidad estructural al pasar a ser una estructura negativa en el suelo cubierto de lajas de roca irregular y mediante la reutilización de inhumaciones, documentándose hasta seis individuos en una misma tumba.
Alumnos de Estados Unidos y Canadá en el Museo Arqueológico de Lucena.
Este proyecto docente continuará durante el mes de septiembre con estudiantes tanto nacionales como profesionales procedentes de Latinoamérica, de Perú, Colombia y Brasil.