IV Congreso Internacional de Innovación Docente en Filosofía.
18 de mayo de 2022. Bajo el título ‘La teoría como crítica: una propuesta educativa para la recuperación de la cultura y su lógica compleja’, la profesora Sheila López ofrecerá una ponencia en el IV Congreso Internacional de Innovación Docente en Filosofía que se celebra en la Universidad Complutense de Madrid entre el 21 y el 23 de junio en la propia facultad.
Sheila López, coordinadora y docente de la Universidad Isabel I, ofrecerá su ponencia el día 22 a partir de las 17:00 en el Seminario A-30, que corresponde a la mesa de Comunicaciones sobre la Innovación en la Enseñanza de la Ética. En su exposición recordará cómo la pandemia ha demostrado que presentar la sociedad como algo incierto hace que emerjan corrientes como el radicalismo, el totalitarismo y el identitarismo. Para la doctora López, “el virus Covid-19 se ha convertido en un virus ideológico; lo que ha sido ideológico no es el virus, sino lo que se ha hecho con el virus a nivel sociopolítico. Representantes de todos los frentes aprovecharon la oportunidad para culpar de la incapacidad de contener el virus a algún movimiento presente o pasado”, detalla.
Los discursos sesgados, unidimensionales y dogmáticos fueron la tónica en los meses de pandemia, presentándose como la única alternativa posible ante una realidad demasiado plural y caótica, señala la docente de la Universidad Isabel I. Y mientras, “los ciudadanos miran al mundo desde una visión simplificada y reduccionista que se extiende a través de los canales de socialización y los medios de comunicación”, matiza.
En contraposición a todo lo anteriormente expuesto, la profesora López indica que solo a partir de un análisis complejo de las lógicas que colman el presente, podremos cerciorarnos de lo necesario de una educación crítica y democrática, una educación cuyo objetivo sea otorgar herramientas que permiten entender a los allegados al mundo "que el mundo es un espacio repleto de incertidumbre, pluralismo e indeterminación", subraya. Por ello, la educación debe plantearse desde los pilares de la pluralidad, la diversidad y la tolerancia.