Sonia López-Rubio, Directora del Máster en Psicología General Sanitaria y Juan Andrés Samaniego, Docente de la Universidad Isabel I durante el webinar
3 de diciembre de 2024. Docentes de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Isabel I han participado en el webinar titulado "El informe sanitario: tips para el profesional", donde ofrecieron claves prácticas sobre cómo elaborar informes sanitarios de manera efectiva.
La sesión, moderada por Sonia López-Rubio, directora del Máster en Psicología General Sanitaria, contó con la intervención de Juan Andrés Samaniego, quien abordó las distintas secciones que conforman un informe y su relevancia en el ámbito profesional.
Samaniego comenzó definiendo el informe sanitario como “una herramienta clave en el desarrollo profesional, la forma en la que nos comunicamos con el mundo”. En el caso del informe psicológico, explicó que se trata de un documento científico que refleja los resultados de un análisis del sujeto realizado por un psicólogo, cumpliendo siempre con los principios éticos recogidos en el código deontológico.
Según el docente, un buen informe debe basarse en fuentes claras, detallar los pasos y procedimientos seguidos, y presentar resultados fundamentados en datos objetivos. Además, señaló que, ya sea dirigido a pacientes o a otras entidades, el informe debe ser comprensible y evitar interpretaciones erróneas por parte del lector.
Tipos de informes
Durante su intervención, Samaniego también explicó los diferentes tipos de informes sanitarios, destacando tres principales. El informe basado en técnicas organiza la información según los test y técnicas aplicadas, lo que facilita su redacción, aunque puede generar incongruencias entre los datos. Por otro lado, el informe basado en problemas es el más habitual, ya que se estructura en torno a las problemáticas planteadas e incluye datos básicos, un listado de problemas, procedimientos de intervención y seguimiento. Este tipo de informe permite describir de forma clara las dificultades del sujeto, aunque se enfoca exclusivamente en conductas problemáticas. Finalmente, el informe basado en la teoría organiza los resultados de acuerdo con un marco teórico específico, aunque puede dificultar su comprensión si el destinatario no está familiarizado con el modelo utilizado.
El docente subrayó que la elección del tipo de informe depende del destinatario y del propósito del documento. Por ejemplo, el informe basado en técnicas resulta más útil para otros profesionales de la psicología, mientras que el basado en problemas es más adecuado para los pacientes.
Apartados de un informe
Otro punto destacado del webinar fue la estructura que debe seguir un informe sanitario. Entre los apartados esenciales mencionó: la identificación del autor, el sujeto del informe y el solicitante, el motivo de consulta, las pruebas realizadas, el procedimiento seguido, el resumen de las sesiones, los resultados obtenidos y las conclusiones con recomendaciones.
Casos Prácticos
Para concluir, Samaniego presentó casos prácticos de pacientes con problemas psicológicos como ansiedad, depresión y TCA, mostrando cómo aplicar los conceptos teóricos a situaciones reales. Estos ejemplos ilustraron la importancia de la precisión en la recopilación de datos y la redacción de conclusiones que respalden un diagnóstico claro y útil.
Para conocer más sobre estos casos y profundizar en este tema, no te pierdas el webinar.