Comunicación - Vie, 24/05/2019 - 10:29
El consumo de sustancias y los trastornos mentales son la principal causa de discapacidad en el mundo según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Es por ello que la salud mental es uno de los campos de desarrollo profesional con más futuro a corto plazo y la psicología una alternativa laboral con grandes perspectivas de trabajo.
Además de los conocimientos teóricos apropiados, a través del Grado en Psicología y posteriores formaciones de posgrado, hacen falta una serie de «extras» o aptitudes que son necesarias para ser un buen psicólogo:
1. Entre las aptitudes de un psicólogo debe estar la de no juzgar
Puesto que cada paciente tiene sus propios condicionantes y peculiaridades el psicólogo debe abstenerse de realizar juicios de valor y buscar, desde la perspectiva del paciente, cual es la alternativo o tratamiento psicológico más efectivo para la persona que tenemos en consulta.
2. La paciencia, una de las virtudes de la personalidad de un psicólogo
Los problemas de salud mental suelen ser complejos y, casi siempre, tener más de una causa, es por ello que una de las habilidades que debe desarrollar un buen psicólogo es la paciencia para buscar una respuesta positiva a un tratamiento.
3. La constancia, imprescindible para ser buen psicólogo
Justo por lo anterior, además de paciente, un buen psicólogo debe ser constante. La mente humana no es una sucesión matemática de causas y consecuencias y no siempre la terapia — o un conjunto de estrategias terapéuticas — surte el efecto deseado cuando queremos. La constancia debe estar siempre en el fondo de armario de un buen psicólogo.
4. Un compromiso firme con el método científico
La psicología es una ciencia y, como tal ha de entenderse y practicarse, alejándose en todo momento de terapias y procedimientos que no sea constatable su efectividad y eficacia.
5. La seguridad debe guiar la personalidad de un psicólogo
En los momentos en los que los pacientes dudan de si mismo o no están convencidos de la propuesta terapéutica del psicólogo este debe mostrar seguridad en sus actos y palabras. Un buen profesional de la psicología actúa con convicción de que la opción que brinda al paciente es la más adecuada y como tal sus palabras tienen que manifestar esa seguridad que en muchas ocasiones el paciente necesita.
6. Empatía
Ponerse en el lugar del paciente, de sus vivencias e inquietudes, es fundamental para entender los motivos que le han llevado a su situación actual y los orígenes del problema Es por ello que la empatía es una cualidad primordial para cualquier psicólogo que quiera ser un buen profesional. Dicha empatía tiene que ser manejada con cuidado para que no produzca efectos negativos que distorsionen los objetivos de la terapia.
7. Un buen psicólogo debe ser accesible
Aunque puede confundirse con la cualidad anterior, no es exactamente lo mismo. Si queremos que alguien con un determinado problema se «abra» a un tratamiento terapéutico, ese alguien debe percibir que puede hacerlo con un psicólogo, que ese profesional es accesible a escuchar y proponer soluciones. Ningún psicólogo puede hacer un buen trabajo siendo como un «muro» ante su paciente.
8. No puedes ser psicólogo si no sabes escuchar
Posiblemente, casi todo lo anterior se resume en una cualidad realmente importante: saber escuchar. Gran número de terapias cognitivo conductuales se apoyan en el intercambio, en el diálogo con el paciente. Y de nada sirve ese diálogo si el profesional de la psicología está centrado en la aplicación de las soluciones, pero no escucha y se asegura de estar aplicando las soluciones apropiadas.
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