Dragon boating

Competición de dragon boating en Canadá.

27 de agosto de 2024. Un estudio reciente ha revelado que la práctica del dragon boating, una forma de navegación a vela en equipo puede mejorar la calidad de vida de las mujeres que han sobrevivido al cáncer de mama. Esta conclusión se deriva de una revisión sistemática realizada por investigadores de la Universidad Isabel I, Sergio Álvarez y Adrián Moreno Villanueva, en colaboración con profesores de la Universidad de Deusto y la Universidad de Burgos.

El estudio, publicado en la revista Healthcare, se basa en un análisis de 77 artículos científicos, de los cuales 10 cumplieron con los estrictos criterios de inclusión, centrándose en la evaluación del impacto del dragon boating en la calidad de vida de estas mujeres. Utilizando el método PRISMA y bases de datos reconocidas como Web of Science, Scopus, Cochrane y Pubmed, los investigadores buscaron evidencias que respaldaran el uso de esta actividad física en la rehabilitación de las supervivientes de cáncer de mama.

Los resultados indican que el dragon boating es efectivo para mejorar la calidad de vida y reducir los síntomas asociados con la enfermedad y su tratamiento. Aunque no se identificaron diferencias significativas en comparación con otras formas de ejercicio físico, los beneficios del dragon boating aumentan cuando se practican durante períodos prolongados.

A pesar de que el dragon boating no se destaca significativamente sobre otras actividades físicas en cuanto a los beneficios para la calidad de vida de las supervivientes de cáncer de mama, “se presenta como una opción viable y efectiva, especialmente cuando se incorpora a largo plazo en los programas de rehabilitación”, explicaron los docentes de la Universidad Isabel I.

El cáncer de mama es el tipo de cáncer más común entre las mujeres a nivel mundial, con una incidencia en aumento desde mediados de los 2000, con unos 35.000 casos anuales en España en 2023. A pesar de su alta frecuencia, la tasa de supervivencia a cinco años es elevada, especialmente en estadios tempranos, gracias a la investigación y la implementación de programas de actividad física. Sin embargo, las supervivientes de cáncer de mama enfrentan complicaciones físicas (lidefema, rigidez, falta de movilidad) y psicológicas (depresión, ansiedad, miedo a una recidiva) que afectan su calidad de vida. El deporte del dragon boat ha ganado popularidad como una forma de mejorar el bienestar y la supervivencia en estas mujeres.

Este deporte de remo se practica con un bote que es impulsado por 10 a 20 miembros de la tripulación distribuidos en ambos lados del bote, con un timonel y un tambor que marcan el ritmo de remada. Los participantes reman unilateralmente con un remo de una sola hoja desde una posición sentada. 

Este estudio aporta una valiosa perspectiva sobre las alternativas de actividad física que pueden mejorar la vida de las mujeres que han superado el cáncer de mama, subrayando la importancia de la continuidad y la duración en los programas de ejercicio para maximizar sus beneficios.