Andrés Seoane Fuente - Mié, 21/02/2018 - 17:58
Ilustración: Néstor L. Arauzo.
Serie: 'Del Dicho al Hecho Histórico' (X)
Esta expresión, muy usada hoy en día, podría tener su origen en el latín (Loqui facile, praestari difficile/ Hablar es fácil, prestar difícil), como recoge Esteban de Terreros y Pando en Diccionario castellano con las voces de ciencias y artes y sus correspondientes en las tres lenguas francesa, latina e italiana (1787), y su significado se relaciona con las dificultades que surgen, prácticamente siempre, a la hora de poner en práctica cualquier acción que en la teoría sonaba sencilla y asequible. Sobre esta idea gira también la explicación de este refrán que da Juan de Mal Lara en Philosofia vulgar (1568), y más concretamente en el epígrafe Los dichos en nos, los hechos en Dios. No obstante, la primera aparición escrita de este refrán data de 1549, cuando fue recogido por Pedro Vallés en Libro de refranes y sentencias de Mosén Pedro Vallés.
Ya fuera de su origen y significado, la popularidad de esta expresión queda también reflejada por su aparición en distintas obras de la literatura española. Quizá la más famosa corresponde a Miguel de Cervantes Saavedra, que lo utilizó doblemente en Segunda parte del ingenioso caballero don Quijote de la Mancha, empleándolo primero en boca de Alonso Quijano para hablar con Sancho, y unos capítulos después como respuesta del escudero al hidalgo. Por otra parte, también el refrán también se cita en la publicación anónima Diálogos de John Minsheu (1559) y en Peñas arriba (1884) de José María de Pereda.
Fuentes de consulta:
Añadir nuevo comentario