La aplicación de las TIC a la educación superior ha permitido que numerosos deportistas de élite retomen o continúen sus estudios, haciendo compatible la competición más exigente con la excelencia académica. Esta tendencia les permitirá además, el día de mañana, tener una alternativa laboral cuando abandonen el podio. Ciclistas, futbolistas, piragüistas, pelotaris...; la variedad de deportistas profesionales que acoge la Universidad Isabel I es amplia. Varios alumnos de la Universidad Isabel I, de naturaleza online, nos cuentan cómo es el tránsito de la competición deportiva de primer nivel al aula virtual.
En la siguiente entrevista publicada en El Correo de Burgos , se analiza la labor que realizan los deportistas profesionales que deben abordar sus competiciones deportivas y compatibilizarlas con sus estudios universitarios. La vida de un deportista profesional suele finalizar a los 30 años. Contar con una formación universitaria te hace enfrentarte con otra imagen al mercado laboral una vez que finalice la etapa de deportista de élite.El reportaje de El correo de Burgos explica la importancia de la educación superior en los deportistas "La aplicación de las TIC a la educación superior ha permitido que numerosos deportistas de élite retomen o continúen sus estudios, haciendo compatible la competición más exigente con la excelencia académica. Esta tendencia además les permitirá, el día de mañana, tener una alternativa laboral cuando abandonen el podio. Varios alumnos de la Universidad Isabel I, de naturaleza online, nos cuentan cómo es el tránsito de la competición deportiva de primer nivel al aula virtual. «No me gustan los estereotipos». Pol García tiene muy claro a qué se refiere, a los deportistas de los que se piensa que no saben «ni hablar ni escribir». Para desmentirlo basta con escuchar –y leer- cómo explica por qué decidió matricularse en una carrera universitaria mientras compite al nivel deportivo más alto. «Siempre es importante tener estudios por diferentes motivos: se puede tener una lesión que te impida continuar con tu carrera. Por eso ahora estoy estudiando Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, y cuando acabe intentaré sacarme el grado de Fisioterapia».
García nació en Tarrasa en 1995, ha pasado por la cantera del FC Barcelona, las categorías inferiores de la Juventus de Turín, y actualmente juega como lateral izquierdo en el Vicenza italiano. Si su generación fue etiquetada apresuradamente como nini (ni estudia, ni trabaja), una nueva hornada de deportistas de élite contradice ese cliché; García compatibilizó desde el principio estudio y deporte, cursando el bachillerato online. Gracias a las nuevas tecnologías aplicadas a la educación, lo que hace unos pocos años era una utopía por los exigentes calendarios de competición y los entrenamientos casi diarios, hoy es una opción cada vez más demandada. Para muchos deportistas la elección entre seguir estudiando o competir a alto nivel llegó impuesta prácticamente desde la infancia. Es el caso del exfutbolista Pablo Amo, quien tras haber jugado durante 16 temporadas como profesional en clubes como el Sporting de Gijón, Deportivo de la Coruña, Real Valladolid o Real Zaragoza, reconoce haber tenido «desde siempre una espina clavada» por no poder estudiar, y ahora puede «reconectar con la carrera» que siempre quiso hacer, en su caso Ciencias de la Actividad Física y el Deporte