La importancia de contar con un plan de seguridad corporativa en las empresas.
30 de junio de 2022. El último número de la revista Cuadernos de Seguridad recoge un artículo elaborado por José Julián Isturitz, profesor del Grado en Ciencias de la Seguridad de la Universidad Isabel I, quien en colaboración con Naiara Isturitz Loinaz, analiza el Plan de la Seguridad Corporativa.
En su artículo, el profesor Isturiz indica que existen una serie de objetivos que deben protegerse en las empresas, que se podría activar, por ejemplo, en un ataque terrorista. Este plan debe cumplir varios niveles de seguridad, en función de la amenaza sufrida. Se debe tener en cuenta, en primer lugar, de las instalaciones, redes, sistemas y equipos físicos y de tecnología de la información, considerándose como servicios esenciales de una empresa.
En segundo lugar, el plan debe recoger la protección de los centros y organismos públicos u oficiales, así como las personas, bienes, servicios, tecnología de la información y otros bienes intangibles, cuya destrucción, ataque o degradación suponga un daño importante. Se trataría de preservar la vida humana, los derechos fundamentales, el funcionamiento de las instituciones o sectores estratégicos, el orden público o las pérdidas económicas o patrimoniales.
El profesor Isturitz considera que “en un mundo globalizado actual en el que vivimos, hay que tener cuenta que existen determinados riesgos de carácter menos grave, como pueden ser daños intencionados, intrusión o robo en las instalaciones, así como otros de mayor naturaleza, tanto voluntarios como accidentales”.
El objetivo del plan estratégico general es lograr un entorno laboral y de convivencia razonablemente seguro de trabajo, considerando como variables fundamentales de este plan la prevención y protección del entorno y de las instalaciones, controlando los riesgos. Para ello, se deben poner en marcha varios objetivos específicos como son la protección de edificios o instalaciones y de las personas, activando medidas como: los sistemas de cierre de edificios, control de acceso a las personas, planes de autoprotección… con la finalidad de tratar de prevenir contingencias adversas.
El docente del Grado en Ciencias de la Seguridad de la Universidad Isabel I argumenta que en la nueva concepción del plan de seguridad corporativo es necesario avanzar en el marco de la transformación digital hacia un nuevo concepto de seguridad integral digitalizada y con inteligencia organizacional, consistente, entre otras medidas, en el cierre de edificios no operativos 24 horas, la telemonotorización, la vigilancia y seguridad dinámica, (mediante vehículo geoposicionado que permita efectuar rutas y detectar anomalías cuando los edificios estén cerrados), reforzar las funciones de los vigilantes de seguridad.
La transformación digital en el Plan de Seguridad Corporativo debe contar con un Proyecto Integral de Seguridad Corporativa, un Proyecto Digital y telecomandado de control y cierre exterior, un Proyecto de digitalización de control de accesos y aforos, un Proyecto de vigilancia y seguridad dinámica, un Proyecto de un centro de gestión de seguridad patrimonial y un Proyecto de actualización e implantación de los distintos planes de autoprotección.