Complexión de los deportistas de élite

7 de abril de 2025. Un estudio reciente, publicado en la revista Retos: Nuevas Tendencias en Educación Física, Deporte y Recreación, ha analizado la evolución de las dimensiones antropométricas de los deportistas españoles de alta competición desde 1951 hasta 2012. La investigación ha sido realizada por Juan Francisco Romero Collazos, profesor del Grado en Nutrición Humana y Dietética de la Universidad Isabel I en colaboración con María Dolores Marrodán y Marisa González Montero de Espinosa, de la Universidad Complutense de Madrid. Los investigadores destacan un aumento significativo en la estatura, el peso y el perímetro torácico de los atletas a lo largo de seis décadas. Según los investigadores, "la evolución secular positiva de las medidas de los deportistas puede explicarse por el progreso en la calidad de vida, incluyendo factores como la alimentación, la atención sanitaria y la higiene".

Los investigadores compararon datos de futbolistas, atletas y baloncestistas desde 1951, con registros de deportistas de las mismas disciplinas en años posteriores. El estudio se basa en el análisis de 3.641 fichas antropométricas de deportistas, 1.109 de oficiales y soldados de la Escuela Central de Educación Física de Toledo y 1.173 de estudiantes universitarios de Medicina y Ciencias de la Universidad Central de Madrid. Entre sus hallazgos destaca que, mientras los futbolistas de 1951 tenían una estatura promedio de 168,30 cm, los reclutas de la misma época apenas alcanzaban los 166,25 cm. En cambio, los atletas de 2012 presentan medidas significativamente superiores, reflejando la tendencia de crecimiento observada en la población general.

El trabajo también resalta diferencias regionales, señalando que los futbolistas del País Vasco y Navarra mostraron dimensiones corporales superiores a la media nacional, en concordancia con otros estudios sobre la población general de esas regiones. Además, se confirma que el incremento en la talla de los baloncestistas ha sido especialmente notable, pasando de 173,56 cm en 1951 a alturas significativamente mayores en la actualidad, como reflejan estudios recientes sobre el baloncesto profesional. “Los resultados reflejan una evolución positiva en las medidas corporales de los deportistas, atribuida a la mejora en la calidad de vida en España desde mediados del siglo XX”, explica el profesor Romero Collazos.

Este estudio no solo contribuye a la comprensión de la evolución física de los deportistas, sino que también proporciona una valiosa perspectiva sobre los cambios socioeconómicos en España y su impacto en la salud y el desarrollo humano.