Visita de la delegación de la Universidad Isabel I a los yacimientos de Atapuerca.
5 de agosto de 2024. El pasado 21 de julio, una delegación del rectorado y de la Facultad de Humanidades de la Universidad Isabel I, visitó los emblemáticos yacimientos de la sierra de Atapuerca. La visita, guiada por el profesor Marcos Terradillos Bernal, director del Grado en Historia, Geografía e Historia del Arte y del Máster en Divulgación Científica, permitió a los asistentes presenciar de cerca el trabajo del equipo multidisciplinar de Atapuerca.
Durante el recorrido, se exploraron seis excavaciones clave: Sima del Elefante, Galería, Gran Dolina, Cueva Fantasma, Galería de las Estatuas y Portalón de Cueva Mayor. Estos sitios arqueológicos son fundamentales para comprender la evolución humana, ya que han revelado detalles sobre los seres humanos, los animales, las herramientas y los ambientes de los últimos 1,5 millones de años.
Entre los hallazgos más destacados, se han identificado seis especies diferentes de homininos en estos yacimientos, para detectar cómo eran los seres humanos, los animales, las herramientas y los ambientes en un periodo de un millón y medio de años.
Se han identificado por los investigadores seis especies diferentes de homínidos en los distintos yacimientos de la sierra de Atapuerca. Destacan el Homo erectus y el Homo sapiens en la Sima del Elefante, en los niveles TE9 y TE7; Homo antecessor en Gran Dolina en el nivel TD6; los preneandertales en la Sima de los Huesos y Galería; los neandertales en Galería de las Estatuas y Cueva Fantasma; y los Homo sapiens en el Portalón de Cueva Mayor.
El equipo de la Universidad Isabel I en los yacimientos antes de iniciar la visita.
Uno de estos homínidos es el más antiguo de Europa conocido hasta el momento, con aproximadamente 1,2 millones de años. Se trata de un Homo sapiens encontrado en la Sima del Elefante, y este resto supera al Homo antecessor hallado en Gran Dolina, que tiene alrededor de 800.000 años.
La visita también destacó las razones por las que esta sierra ha sido un punto clave para la presencia humana durante tanto tiempo. La ubicación estratégica de Atapuerca, en el corredor de la Bureba, ha sido un cruce natural para animales y humanos. Además, la abundancia de agua, fuentes de materias primas (como sílex, cuarcitas, cuarzos y areniscas) y las cuevas que ofrecían refugio, han hecho de este lugar un asentamiento ideal a lo largo de milenios.