Peligro, riesgo, vulnerabilidad y exposición

Persona caminando sobre una cuerda en el aire con los ojos tapados.

Serie: 'Seguridad a tu alcance' (XLV)

A menudo confundimos riesgo con peligro, pero aunque son conceptos cercanos, no son lo mismo.

Cuando nos enfrentamos a una situación peligrosa, tenemos claro que se pueden producir unos daños. La medida de la magnitud de éstos es a lo que se denomina riesgo.

Definiremos por lo tanto el riesgo como una medida de la magnitud de los daños frente a una situación peligrosa, que se mide asumiendo una determinada vulnerabilidad frente a cada tipo de peligro1.

Si bien hay definiciones precisas circunscritas a determinados círculos y sectores como por ejemplo el Sistema Nacional de Protección Civil2, siempre se debe distinguir entre:

• Peligro: posibilidad potencial de ocurrencia de un daño.
• Riesgo: probabilidad de ocurrencia de un daño o un evento de pérdida.

Para ello, debemos tener en cuenta la diferencia entre posibilidad (referente a si algo puede ocurrir o no, es decir, es una cuestión dicotómica: si/no), y probabilidad (referente a un porcentaje o parte de un total, lo que conlleva un grado de incertidumbre)

De otro modo, podemos decir que peligro es aquello que puede causar daño (es la característica intrínseca o condición de la que se puede derivar un daño, una paralización de un proyecto o un proceso, una enfermedad o una lesión), mientras que el riesgo es lo que puede ocurrir durante la interacción o exposición al peligro. En síntesis, el riesgo es la consecuencia del peligro. No tomar las medidas necesarias para minimizar el peligro puede implicar, como resultado, en la materialización de un riesgo, esto es, en la producción de un daño.

Caminando sobre una cuerda a gran altura, ejemplo de peligro.

Por ejemplo, un peligro es el trabajo en altura, el riesgo derivado de él es el de caída a distinto nivel. Otro ejemplo de peligro sería el trabajo con soldadura, y su riesgo asociado, una quemadura. Existen muchos otros ejemplos: Conducir un coche con exceso de velocidad es un peligro que incrementa el riesgo de sufrir un accidente de circulación. La manipulación de armas es peligrosa, dado que pone en riesgo de lesiones e incluso muerte a las personas que la manipulan o que se encuentran cerca. Ir por una calle o un barrio peligroso sin iluminación por la noche es sin duda un riesgo de atraco.

Gráfica que diferencia peligro y riesgo.

Pero un riesgo no tiene por qué solo provenir de un solo peligro, lo que nos permite hablar del concepto de factores de riesgo. Así, por ejemplo, el riesgo de caída al mismo nivel en la cubierta de un barco en altamar puede ser debido a su propio movimiento (más si hay mar brava), pero también a que en el suelo haya obstáculos (un cabo suelto, un cubo o cualquier otra cosa), o a que haya sustancias en el suelo que puedan provocar una caída o un resbalón (suelo mojado, vertido accidental de un aceite, etc.)

Elementos que pueden causar riesgo de caída al mismo nivel en un barco.

Como vemos, el riesgo es la combinación de la probabilidad y la consecuencia de no controlar un peligro, siendo, en definitiva, el peligro la causa, y el riesgo el efecto, y es por ello que, mientras que los peligros se identifican, son los riesgos los que se evalúan.

Otro concepto no menos importante es la vulnerabilidad o predisposición del sistema (edificio, persona, instalación, ecosistema, etc.) a sufrir daños al presentarse un peligro. Definimos la vulnerabilidad como la probabilidad de sufrir daño cuando se ha presentado un peligro en unas determinadas circunstancias (lo que viene a ser el grado de susceptibilidad del sistema a ser afectado por un peligro en unas determinadas circunstancias).

En base a lo anterior algunos autores afirman que, cuanto mayor es la vulnerabilidad, mayor es el riesgo (puesto que el riesgo existe porque hay vulnerabilidad), pero cuanto más factible es el perjuicio o daño, mayor es el peligro3,, puesto que la mayor posibilidad, o potencial de ocasionar daño implica, por definición, la exposición a un peligro mayor, lo que nos lleva a la definición de la situación de amenaza, que es precisamente aquella en la que un sistema está expuesto a un peligro en mayor o menor medida.

En vista de todo lo anterior, de forma concreta, se puede definir riesgo como el resultado de la combinación de tres conceptos complejos: un peligro concreto generado; la vulnerabilidad intrínseca de los sistemas al peligro concreto y la exposición de estos elementos vulnerables al peligro concreto, o lo que es lo mismo: 

Riesgo = peligro × vulnerabilidad × exposición (i)

La expresión anterior se puede simplificar, expresando el peligro como probabilidad por una parte, y por otra considerando los daños esperados, esto es, las consecuencias, como el resultado conjunto de la vulnerabilidad intrínseca del elemento vulnerable y la exposición al peligro concreto:

daños esperados =  vulnerabilidad × exposición (ii)

con lo cual finalmente tendremos que:

 Riesgo = probabilidad (frecuencia peligro concreto) × consecuencias (daños esperados) (iii)

Finalmente, es necesario resaltar que un bajo nivel de riesgo puede venir determinado por algunos de los factores muy elevados (por ejemplo la vulnerabilidad o la exposición) pero compensados con otros valores muy pequeños (por ejemplo la probabilidad), por lo que hay que hacer un análisis riguroso y específico para cada riesgo.

Referencias

(1)  Goussen, Benoit; Price, Oliver R.; Rendal, Cecilie; Ashauer, Roman (2016). Integrated presentation of ecological risk from multiple stressors. Scientific Reports 6: 36004. 

(2) Ley 17/2015, de 9 de julio, del Sistema Nacional de Protección Civil.  Artículo 2. Definiciones. BOE 10 de Julio de 2015

(3)  Fleta-Asín, Jorge; Muñoz, Fernando (2 de abril de 2024). Risk allocation schemes between public and private sectors in green energy projects. Journal of Environmental Management.

Editor: Universidad Isabel I

ISSN 2697-288X

Burgos, España