Aplicaciones de la criminología en la seguridad ciudadana

Una de las principales preocupaciones de cualquier sociedad es el mantenimiento de unas condiciones mínimas de seguridad para todos sus integrantes. La seguridad ciudadana es una de las principales claves a tener en cuenta en estudios sociológicos y estadísticas sobre calidad de vida. También uno de los motores potenciadores del desarrollo económico y social. En colectivos seguros resulta más fácil prosperar, diseñar y desarrollar proyectos de vida y, en general, avanzar hacia el progreso.

Por este motivo, la seguridad pública es uno de los aspectos que los gestores y dirigentes políticos tienen más en cuenta, a la hora de diseñar planes de emergencia y protocolos destinados a la prevención del delito. Por eso, los aliados perfectos para ellos son los expertos específicamente formados en criminología y seguridad pública.

La criminología es una ciencia social al ocuparse de los aspectos del ser humano, aplicando su saber científico en otras áreas como la psicología, medicina, sociología y, como no, entre otras en la seguridad ciudadana.

Los criminólogos son los encargados de averiguar cómo prevenir el delito

Como ya te comentamos en este blog, una de las vertientes profesionales que más pueden contribuir en la prevención del delito es la criminología. Porque se encarga de analizar los comportamientos de los hipotéticos criminales, sus condicionantes sociales, los entornos en los que se desarrollan y los patrones sociales, psicológicos y antropológicos que condicionan su conducta. ¿Por qué los delincuentes se comportan como lo hacen? ¿Cómo disminuir, en la medida de lo posible, aquellos disparadores de posibles conductas antisociales? De este y de otros asuntos se encargan los criminólogos.

Por eso, para entender cuáles son los riesgos en una sociedad en un momento determinado, para diseñar planes emergencia para la seguridad pública y contribuir en la elaboración de protocolos de contingencia y de emergencia para la prevención del delito, los criminólogos son altamente valorados por las instituciones públicas, como asesores técnicos y aliados estratégicos de las ciudades, comunidades y estados.

Saber cómo actuar para garantizar la seguridad pública

No obstante, no es suficiente -aunque sí imprescindible- conocer las causas de los delitos. También es necesario saber cómo responder, cuándo se ha producido el delito y cuáles son las medidas y herramientas para minimizar los riesgos de que esto suceda, y saber cuál es el plan de emergencia más adecuado a implantar. Los expertos en ciencias de la seguridad también pueden poner al servicio de la sociedad todos sus conocimientos. ¿Cuáles son las vías preferidas de los posibles delincuentes para actuar? ¿Cómo protegerse ante ellas? ¿Cómo actuar en el contexto cibernético para reducir el impacto del crimen electrónico? A todas estas preguntas puede responder alguien formado con un doble grado en criminología y ciencias de la seguridad.

Por eso este perfil profesional es tan valorado por los poderes públicos y por los responsables en garantizar nuestra seguridad. También es una vía de entrada excelente si crees que tu futuro laboral puede estar en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. No olvides que, a mayor especialización dentro de ellas, más oportunidades tienes de ascender en el escalafón, obteniendo un abanico mayor de posibilidades de futuro.

La mejor respuesta ante la política del miedo

Actualmente está en el debate público la existencia o no de amenazas para la seguridad pública, relacionadas con los flujos migratorios y otros fenómenos sociales típicos de la globalización. Para no contribuir en el crecimiento de la ‘bola de nieve’ que supone la expansión -lógica- de cierto miedo social, es imprescindible la presencia de profesionales específicamente formados para garantizar nuestra seguridad en todos los ámbitos de acción posibles. Se trata de atajar las causas de la violencia y el delito desde la raíz y de garantizar nuestra tranquilidad a través del trabajo profesionalizado de expertos.