WISE (Women in Sport and Exercise)

Comité Olímpico Internacional

Serie: 'In Corpore Sano' (XXXIII)

Históricamente, el deporte ha sido un ámbito dominado por los hombres. Las mujeres inicialmente se desanimaron a participar en actividades deportivas y de ejercicio porque se pensaba que eran demasiado frágiles(1).

A lo largo del siglo XX, las mujeres han obtenido un mayor acceso y oportunidades de participación en el deporte(1). Aunque las mujeres no han tenido las mismas oportunidades de participar en el deporte profesional que los hombres(1). Las mujeres han tenido que luchar por décadas para conseguir inclusión en el ámbito olímpico. En 1900 fue la primera vez que las deportistas tuvieron la oportunidad de participar en los Juegos Olímpicos que se llevaron a cabo en París. En aquel año solamente participaron 22 mujeres, lo que representaba alrededor de un 2.2 % del total de los deportistas. Además, sólo se les permitió participar en deportes como tenis, vela, croquet, hípica y golf. Mientras que recientemente, en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, se logró una representación femenina del 48.8% del total de los deportistas. Lo cual pone el mayor número de mujeres deportistas (5400) en la historia de las olimpiadas(13).

La práctica regular de actividad físico-deportiva genera, para quien la realiza, beneficios globales: físicos, psíquicos, afectivos y sociales. Y sin embargo, en muchos casos, sigue siendo un ámbito limitado a la mujer y ya no sólo a nivel de práctica o de participación en competiciones, sino también de representatividad en las diferentes estructuras deportivas, visibilización en los medios de comunicación, objeto de investigaciones científicas, etc (2).

El deporte y la práctica físico-deportiva son actividades totalmente integradas, aceptadas y valoradas positivamente en nuestra sociedad; sin embargo, se siguen generando desigualdades entre hombres y mujeres, que hacen que el rol que la mujer desarrolla en este ámbito esté asociado a valores estereotipados, alejados de la realidad y que no facilitan su inclusión en este mundo, bien como practicante, directiva, deportista, entrenadora, etc (2).

Desde sus orígenes, el deporte moderno ha sido un espacio construido, concebido y dominado por hombres. El acceso de  las mujeres a los escenarios deportivos ha sido fruto de constantes e intensas luchas frente a los estereotipos, prejuicios y creencias que han limitado o directamente prohibido su participación (3). Las mujeres han sido percibidas como outsiders, sobre todo aquellas que deciden practicar deporte de competición (12). A pesar de los avances sociales acontecidos, el deporte femenino continúa siendo estructural y simbólicamente más precario (12).

En España, el acceso de las mujeres al deporte ha transcurrido en paralelo a su lenta y progresiva incorporación al espacio público. A pesar de las mejoras alcanzadas, el reto de nuestra sociedad no debería terminar en asegurar el acceso a la práctica deportiva, sino en alcanzar la  igualdad efectiva (3,11).

Mujer haciendo pesas

El deporte tiene el poder de cambiar vidas. La capacidad de impulsar la igualdad de género enseñando a las mujeres y las niñas el trabajo en equipo, la autosuficiencia, la resiliencia y la confianza. Las mujeres en el deporte desafían los estereotipos de género y las normas sociales, son modelos inspiradores y muestran a hombres y mujeres como iguales (4).

Desde ONU Mujeres, presentan la Iniciativa Deporte para la Generación Igualdad que invita a las partes interesadas de todo el ecosistema deportivo a formar parte de una poderosa coalición para hacer de la igualdad de género una realidad vivida en y a través del deporte (4).

La igualdad de género es un principio fundamental de la Unión Europea (UE) (5). El principio de igualdad de género sustenta todas las acciones financiadas por Erasmus+ Sport y se fomentan activamente los proyectos que apoyan el deporte femenino (5). Iniciativas como los premios anuales BeInclusive EU Sport Awards reconocen a aquellas organizaciones que utilizan el deporte para aumentar la inclusión social, incluida la igualdad de género5. WISE es un Proyecto Erasmus+ destinado a promover estilos de vida activos y saludables entre mujeres jóvenes de 15 a 24 años, abordando la brecha de género en la práctica del deporte y la actividad física, y evitando posibles abandonos (6,7).

WISE (Mujeres en Deportes y Eventos) es un recurso norteamericano para las mujeres en el negocio de los deportes. WISE trabaja para: ayudar a las mujeres a navegar y acelerar sus carreras; ayudar a las mujeres a comprender su valor colectivo; fomentar las conexiones entre compañeros; y defender la contratación y el avance de las mujeres en la industria (8).

En nuestro país, la mujer española ha venido adquiriendo en las últimas décadas un papel más relevante en el mundo del deporte, de forma paralela a su incorporación activa en todas las dimensiones sociales (9).

El principal objetivo de este tipo de programas es fomentar la participación de las mujeres en el ámbito de la actividad física y el deporte en igualdad de condiciones que los hombres, superando las barreras u obstáculos que aún hoy día dificultan la realidad de una práctica con equidad de género en este ámbito de la vida (8).

Desde el Consejo Superior de Deportes (CSD) se ha propuesto que el fomento de la participación de las mujeres ha de ser para todas las edades, modalidades deportivas, grados de implicación/competición y niveles profesionales (puestos técnicos, de gestión, administración y dirección). Para poder abarcar este objetivo tan amplio es indispensable la coordinación con múltiples Organismos (Instituto de la Mujer, Federaciones Deportivas, Universidades, Comunidades Autónomas, Comisión Mujer y Deporte del COE, Ayuntamientos, empresas, etc.) (8).

Desde el Instituto de la Mujer se han marcado objetivos similares por lo que con la intención de cumplir los objetivos propuestos, el Instituto de la Mujer ha firmado convenios con instituciones directamente relacionadas con la práctica físico-deportiva: el Consejo Superior de Deportes y el Comité Olímpico Español (2).

Como conclusión final, recalcar que desde muchas instituciones y organismos se trabaja cada año por superar las desigualdades y expandir el potencial de las mujeres y las niñas en el deporte. Cada nueva generación de mujeres se muestra más comprometidas e interesadas en el deporte, por ello, con mayor celeridad, se celebrarán nuevos hitos y metas en el deporte femenino.

Infografía. Comité Olímpico Internacional. Datos estadísticos

Bibliografía:

1. Women in Sport Historical Perspectives. Elizabeth A. Gregg, Vanessa H. Gregg, M. Clin Sports Med 36 (2017) 603–610. sportsmed.theclinics.com 0278-5919/17/ª 2017 Elsevier Inc.
2. Instituto de las Mujeres. 
3. Desigualdad de género en el deporte de competición: voces y reflexiones. Belén Donoso Pérez, Amalia Reina Giménez, Alberto Álvarez-Sotomayor. 2023. Retos, 47, 557-564. Federación Española de Asociaciones de Docentes de Educación Física (FEADEF) ISSN: Edición impresa: 1579-1726. Edición Web: 1988-2041- 557 - Retos, número 47, 2023 (1º trimestre). Universidad de Córdoba (España).
4. UNWomen.org 
5. Unión Europea 
6. Wise Poject 
7. Ecos Europe 
8. Wise Work 
9. Ministerio de Cultura y Deporte. Gobierno de España. 
10. Eurostat 
11. Género y  deporte. Martín, M., Soler, S., & Vilanova, A. (2017). En M. García Ferrando, N. Puig, F. Lagarde ra, R. Llopis y A. Vilanova (Eds.), Sociología del deporte (pp. 97-123). Alianza Editorial.
12. Women and competitive sport: perceived barriers to equality. Donoso, B., Reina, A., & Álvarez-Sotomayor, A. (2022). Cultura, Ciencia y Deporte, 17(54), 63-86. ht tps://doi.org/10.12800/ccd.v17i54.1887
13. Olympics 

Editor: Universidad Isabel I

ISSN 2697-1992.

Burgos, España