Patricia Comesaña - Vie, 14/10/2016 - 16:18
Serie: 'Del Dicho al Hecho Histórico' (XLVII)
¿Cuántas veces hemos escuchado la expresión «las paredes oyen»? Pero ¿sabemos realmente de dónde viene esta expresión tan cotidiana que expresa un aviso, una advertencia de prudencia y cautela a la hora de hablar, comentar o expresar ideas o quejas en un lugar determinado?
Pues su origen está en el siglo XVI, en Francia, durante las persecuciones y luchas religiosas contra los hugonotes que desembocaron en la Noche de San Bartolomé. Temerosa y desconfiada, parece ser que la reina Catalina de Médicis obligó a construir conductos acústicos secretos a lo largo de los muros de su palacio con el fin de espiar a sus rivales y personas de las que desconfiaba, para poder actuar ante posibles amenazas y conspiraciones.
Desde entonces, la expresión «las paredes oyen» se volvió cotidiana tras descubrirse este ardid de la reina Catalina de Médicis.
Fuente de consulta: muyhistoria.es
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